La Alarma: Hormigón que 'Explota'
Es una imagen habitual en muchos garajes de Barcelona construidos hace décadas: trozos de hormigón en el suelo y, en el pilar, las barras de acero expuestas y oxidadas. Muchos vecinos lo llaman erróneamente 'aluminosis', pero en la mayoría de casos se trata de carbonatación.
¿Qué es la Carbonatación?
El hormigón sano tiene un pH alto (alcalino) que protege el acero de la oxidación. Con el tiempo y el CO2 de los coches, el hormigón pierde ese pH (se carbonata). Cuando la humedad llega al acero desprotegido, este se oxida.
El problema: El óxido ocupa más volumen que el acero sano, ejerciendo una presión interna brutal que rompe el hormigón desde dentro.
¿Es Peligroso?
Sí. Si no se trata, la corrosión reduce la sección útil de acero del pilar. Menos acero significa menos capacidad para soportar el peso del edificio. En estadios avanzados, puede comprometer la estabilidad global.
Soluciones: Reparación vs. Refuerzo
Un informe pericial determinará la gravedad:
- Reparación Cosmética (Daño Leve): Limpieza del óxido, pasivación del acero y reconstrucción con mortero estructural.
- Refuerzo Estructural (Daño Grave): Si el pilar ha perdido mucha capacidad, necesita ayuda. Se suelen aplicar:
- Encamisado metálico: Rodear el pilar con una jaula de acero.
- Fibra de Carbono: Láminas de alta resistencia adheridas al pilar.
Recomendación para Comunidades
No intente tapar las grietas con cemento normal. Eso solo esconde el problema mientras la corrosión avanza. Solicite un diagnóstico técnico para calcular el refuerzo necesario.